No era eso
Jesús Cascón
Después del culebrón de La Cerrallana y ver el desarrollo de los dos Plenos Extraordinarios celebrados, tengo que decir que éramos cada día más los bejaranos que nos preguntábamos cuales podrían ser las razones por las cuales el actual equipo de gobierno, no se decidía de una vez por todas a constituir una «Comisión de Investigación», destinada a aclarar las cosas en este tema de una vez por todas y llegar incluso a pedir responsabilidades a las que hubiera lugar.
Sin embargo ahora tras leer el último acta de la Comisión Informativa de Medio Ambiente y Urbanismo de nuestro Ayuntamiento, celebrada el pasado día 1 de octubre y en la que se acuerda estimar como procedente el recurso interpuesto por Promociones Puente Romano respecto a la suspensión dada por la Comisión Provincial de Urbanismo del pasado 2 de marzo, relativa a la aprobación de la Modificación Puntual del Plan General de Béjar en el paraje de La Glorieta. (ver documentos a continuación)
Lo que traducido al castellano antiguo, como bien se recoge en el último Editorial de Béjar-biz «significa que el Ayuntamiento da vía libre al ignominioso pelotazo urbanístico perpetrado por los Sres. Riñones y Valle, en la legislatura anterior, en la Glorieta». Pues bien ahora tras leer ese actas y revisar el nuevo editorial de Béjar biz, por no hablar del artículo premonitorio de Juan Carlos Martín Pizarro, respecto a este tema, somos muchos los que empezamos a entender esa postura ambigua del actual alcalde en este tema y ya empezamos a tener claras las respuestas y las razones por las cuales nuestro actual alcalde se muestra reacio a la constitución de dicha comisión investigadora y con ellos que los bejaranos disipemos nuestras dudas sobre todo lo que ha ocurrido y puede ocurrir con respecto a La Cerrallana y su entorno.
Ahora está claro que la pelota está en el tejado del equipo de gobierno. A este alcalde es al que corresponde disipar todas las dudas que hoy tenemos planteados con respecto a estos convenios urbanísticos. Unos convenios, que no olvidemos, no pasaron desapercibido en su momento para su partido y para el grupo socialista, cuyos miembros en la anterior etapa ya se mostraron reacios a aprobar y secundar este tipo de iniciativas urbanísticas. No sabemos que habrá cambiado desde entonces, si es que ha cambiado algo, pero haría bien Cipriano Gonzáles de poner sus cartas encima de la mesa y aunque tan sólo fuera por no dejar a sus compañeros de corporación al pié de los caballos, con Ramón Hernández y Ana Muños de la Peña a la cabeza, haría bien en aclarar cuanto antes su decisión de desbloquear este tema y permitir una expansión urbanísticas poco recomendable. Si en aquel momento, como ya hemos señalado, el PSOE se opuso a la firma de este tipo de convenios urbanísticos, ya que como se decía y se mantenía por los anteriores portavoces socialistas estos no deberían tener cabida fuera de un Plan General, un Plan que recordemos se debería realizar con la participación de los bejaranos y con el gran objetivo prioritario de revitalizar el casco antiguo. Resulta que ahora nos encontramos con un equipo de gobierno, al que se le debería suponer un poco de coherencia con la política llevada a cabo desde la oposición por sus compañeros, y no con un alcalde y un grupo socialista más cercano a la política urbanística del anterior alcalde y su equipo y en la que es fácil adivinar quien o quienes serán los principales beneficiarios.
De lo contrario, de seguir por este camino, y que me perdone el alcalde por mi osadía, seríamos muchos los que empezaríamos a pensar si verdaderamente mereció la pena tanto esfuerzo por nuestra parte para dar conocer todos los desmanes de la anterior corporación en materia urbanística y que al fin y a la postre resultaron decisivos a la hora de mantener informados a los bejaranos, y que estos decidieran con sus votos otorgar el castigo al PP en beneficio de «esos nuevos aires» que se iban a instalar en nuestro Ayuntamiento. De no actuar así, de continuar este alcalde y su equipo en sus treces de no proceder a la constitución de esa «comisión de investigación» que aclare de una vez por todas la situación de La Cerrallana, de continuar con su política permisiva y permitiendo que el PP siga sembrando dudas a la hora de defender su gestión acusando a este alcalde y su equipo de actuar de espalda a los intereses de los bejaranos, al acusarles de incapacidad y oscurantismo y lo que es más grave de ser los responsables de la perdida de 70 puestos de trabajo…De seguir en una palabra, con esta política continuista y que solo tiene como objetivo el beneficio de ciertos empresarios, Cipriano González y su equipo habrán empezado muy pronto a traicionar la confianza en ellos depositada por la mayoría de aquellos nuevos votantes que decidieron acabar con aquellas formas de ejercer la política.
Lo dicho anteriormente, ahora la pelota está en el tejado del actual alcalde y a él, y sólo a él, le corresponde que más de uno, empezando por mi mismo, no tengamos que acordarnos de Ortega cuando, como bien recuerda en su editorial Bejar.biz, escribía aquello de : No era eso. Ojala que nosotros no nos tengamos que arrepentir, al menos tan pronto, de todo el apoyo y esfuerzo por lograr que las cosas empezasen a cambiar en nuestra ciudad tras los últimos años de gobierno de Alejo Riñones.